Pero casi dos años llevo enfrentándome a ti y puedo decir que mi fuerza es muchísimo mayor que la tuya.
Cada día intentas perturbarme, y cada día tu intento es fallido. No puedes conmigo.
Querida Distancia, hay algo que no podrás cambiar, y es mi destino.
Sabes que mis mañanas serán a su lado, que mis labios no prenderán con nadie más.
También sabes que no me voy a rendir, lo único que estás haciendo es alargar algo inevitable.
Cuanto más intentas alejarme, mayor es mi ilusión por volver a viajar.
Pero un día no me voy a aguantar y esto acabará, nunca más volverás a saber de mí, Distancia.
0 comentarios:
Publicar un comentario